Tras cuatro meses de confinamiento en la India, y cuando todo el país esperaba empezar a vivir «la nueva normalidad», a la familia de Akhil, sin sospecharlo, le iba a tocar enfrentarse a una situación aún más complicada.

Esta es la historia de Akhil y su familia, de la que ya os hemos hablado durante la crisis generada por la pandemia del coronavirus. Akhil es un niño de 4 años que lleva desde los dos asistiendo a uno de nuestros parvularios en Chedda Nagar. Tiene una hermana mayor, Bhagyashree, que fue la primera de los hermanos en iniciar su educación en el mismo centro de preescolar. En aquel momento, Bhagyashree vivía en Chedda Nagar con su tía, y el resto de la familia vivía en Nanded, a más de 400km de Bombay. Para estos padres que apenas han podido estudiar, apoyar a sus hijos en los estudios ha sido siempre una prioridad. Cuando vieron cómo Bhagyashree iba avanzando en sus aprendizajes, decidieron que querían que sus otros dos hijos, Mahek y Akhil, pudieran asistir a la misma escuela que su hermana mayor. Así pues, emigraron a Bombay con la esperanza de un futuro mejor y más brillante.

Akhil empezó en nuestro parvulario, y resultó ser tan buen estudiante como sus hermanas. Pero llegó la pandemia y todo cambió.

Sus padres intentaron resistir, y recibieron la ayuda de Sonrisas de Bombay para poder aguantar los días de confinamiento sin salir a trabajar. Pero siendo jornaleros, las semanas sin trabajo les dejaron sin ingresos. Además, el propietario de la chabola donde vivían insistía en cobrar el alquiler pendiente y finalmente decidieron volver a Nanded, donde pensaron que les sería más fácil contar con el apoyo de familia y amigos.

Desde la Fundación llevamos meses trabajando el acceso a la educación online. Adaptando materiales de todos los niveles a las necesidades de conectividad y alfabetización de las diferentes familias. Así, a pesar de los cambios, Akhil ha podido seguir estudiando y ¡no se ha perdido ni una sesión!

cuando parecía que todo volvía a funcionar, a Akhil le diagnosticaron un tumor. Durante unas semanas, nuestro equipo detectó cierto nerviosismo en la madre de Akhil. El pequeño empezó a presentar fiebre y dolor de cabeza. Sus padres, que ya estaban muy estresados debido a su situación laboral, se sintieron desesperados y empezaron a visitar diferentes hospitales en busca de atención médica. La presión les llevó a guardar silencio sobre el estado de salud del pequeño, y no lo comentaron con nuestro equipo en ninguna de las llamadas que les hicimos de seguimiento.

Finalmente, después de muchas pruebas, detectaron que Akhil tenía un tumor en la cabeza. Su madre ya no pudo más con la presión, y explicó al equipo de Sonrisas de Bombay todo lo que estaban viviendo y la enfermedad del pequeño. En ese momento, pusimos en marcha los mecanismos necesarios para prestarles apoyo en todo el tratamiento médico.

Akhil tiene por delante 9 meses de tratamiento, con reposo absoluto. Estamos deseando volver a ver a Akhil haciendo sus deberes y bombardeando a preguntas a las profesoras.

Mientras tanto y gracias a tu compromiso y al apoyo que nos brindas, seguiremos a su lado en este difícil camino.  ¡Mejórate pronto Akhil!

Esperamos poder contarte en unos meses que Akhil ha superado la enfermedad y que ya lo tenemos de nuevo en el parvulario.